27 dic 2012

La razón del rey

Nuestro querido y alabado rey ha salido en su ya clásico y en ocasiones molesto -estás en el buen ambiente familiar y de repente aparece un señor que en ocasiones se asemeja a un vendedor productos de limpieza- discurso de navidad.

Su orgullo no lo sé, pero mi satisfacción es volver a ver a este buen hombre todos lo años, casi como la típica visita del familiar lejano que viene a estos banquetes que en forma de bucle colman tu alimentación (cuando crees que has terminado, tienes otra, parece que nunca terminan). Y entre festín y festín, tu madre te dice que te tomes un yogurt para no "irte con el estómago vacío": me cuesta explicarle que si lo único que no está mi estómago, es vacío.

Pero no nos vayamos del tema. Ha salido JC I, "jeyce one" para los más internacionales o fabricantes de perfume, con esa tomas de cámara imposibles que ni en Avatar, ese belén carente de reses... Y sí, eso parece que fue lo más importante que pasó.

Mi padre me decía, "no sé para qué lo ves, si no va a decir nada de lo que tiene que decir".
Y yo, como ese niño inocente que tiene fe en las personas mayores, le contesté que esperará, que ahora diría algo.

El caso, que mi madre diciendo que cogiera rebeca por si cogía frío al cruzar la calle para ir a casa de mis tíos, el teléfono sonando, mi padre con su característico buen humor acordándose de la familia real y tocando a la puerta mis abuelos a ver si bajamos, por si no llegamos a tiempo y tardamos media hora pasar el paso de cebra -quién sabe si han puesto un semáforo nuevo-.
Al final, no me enteré de lo que dijo. La cena fue bien, como cada año, pero yo no pude ver el discurso de nuestro rey. Lo peor, no está en perderse la línea argumental del guion perfectamente preparado por la Casa Real; lo peor fue darle la razón a mi señor padre: eso fue lo peor.

2 dic 2012

¿Dónde está Zapatero cuando se le necesita?

AVISO: Abstenerse carentes de sentido del humor. 


A mucha gente se le ponen los pelos de punta con solo pronunciar el nombre de ZAPATERO. Y es que el hombre de las cejas imposibles ha sido uno de los más acusados por no reconocer la crisis en la que estamos inmersos y no pinchar esa bonita burbuja en la que vivíamos. Nadie puede olvidar cuando estábamos en laChampionsLí...

Pero es que nuestro amigo del frenillo nos está haciendo pasar por el aro continuamente con recortes y más recortes. Quiere cepillarse las pensiones, hacer más difícil la vida a los discapacitados, dejarnos sin medicamentos, sin educación...

Digamos que de popular, solo tiene el nombre del partido. Dice que hace las cosas que tiene que hacer... pero nadie le ha dicho que lo que tiene que hacer es marcharse - o por lo menos igualarse la barba con el tinte-.
Con Zapatero vivíamos mejor. Sin ninguna duda. Los gays se casaban, podían tener hijos - adoptados-, los soldados volvían a casa después de una guerra inventada, las niñas de 16 podían extirparse los fetos no deseados a cual verruga... Sí. Eran otros tiempos. Otros políticos muy buenos como Zerolo o Sinde, o aquella Ministra de Sanidad...

Ahora tenemos políticos como apolillados. Como sacados de una foto en blanco y negro. De faldas con borlas, de blusas de mi abuela, de bigotes mal pintados, de calvas con cuatro pelos... El otro gobierno era mucho más... ¿guapo? Sí.

Zapatero era mejor. Como más agraciado y más joven. Con esos ojos verde acuarela, ese principio de chepa sin llegar a ser jorobado, esas hijas que por pecar y ser hijas de un socialista fueron condenadas por Aznar a parecer recién llegas del mismo infierno.

Y es que cualquier socialista ahora se pregunta dónde estará su líder. El pasado domingo salió para celebrar el 30 aniversario del primer gobierno socialista de la mano de Felipe González.
La masa quiere su vuelta. Quiere pensar que lo de Rajoy es una broma pesada y que el punto álgido del chiste viene con su retorno.


Zapatero sí que se estará descojonando en su casa, sí...