4 feb 2011

Luz

Y dijo Dios: "Hágase la luz". Y la luz se hizo.
Y entonces me he dado cuenta de que así está bien.

¿Quién canta para tí?
¿Quién te dice al oído, quédate?
¿Con quién compartes ese calendario, de la pared?
¿Quién te espera al salir, cuando dan las diez?
¿Quien se ríe contigo, delante de un café?
¿Con quien escucharas esa canción?
¿Quien es el encargado de amueblarte, el corazón?

Nosotros somos luz; la luz de la vida: de nuestra propia vida y de la gente que nos rodea.
Alguien dijo alguna vez que sólo podemos ver nuestros ojos en los ojos del otro.

Quiero disfrutar, quiero sacar mil fotos sin cámara a cada instante que merezca la pena recordar. Somos finitos e imperfectos, lo que nos lleva a buscar la perfección y la eternidad.
La perfección en el sentido de ir mejorando siempre, todos y cada uno de los días e ir aprendiendo. Y ser eternos hasta el punto de que quizás no a nivel mundial, ni siquiera nacional, pero ser recordado por los tuyos, hacer mella en ellos, y que pronuncien tu nombre cuando ya no estés.

Es importante quien te coge la mano, quien se acerca a tus brazos, quien comparte contigo la cama...
Llámenme soñador, peliculero, idiota e ingenuo. Pero como dice la canción, esta es la mejor manera que conozco de vivir; me irá mejor o peor, tampoco va tan mal y es la mía.
Me gusta saber que lo que pasa en nuestras vidas pasa por algo y que pese a todo nosotros somos dueños de nuestros actos y no hay alguien que lo controle todo con unos títeres.

Caminemos, dejémonos de círculos cerrados y de tonterías que nos impidan hacer eso para lo que estamos aquí.
¿Lo sabes no?
Sí, es eso...
Todos la buscamos.



Bonus track:


2 comentarios:

mr.spank dijo...

puto levante

neko dijo...

Curiosa manera de comenzar la entrada...
A mi también me gusta saber que cada cual es responsable de sus actos y de cada paso que da.